La escalera de la violencia de género. 25N

Nuestra escalera muestra que el maltrato se da poco a poco, es un proceso que anula a la persona, cada escalón te acerca más a un desenlace fatal. Quizá solo tenga un fallo, culpar a la víctima. Es retorcido, pero no nos damos cuenta de que ponemos la solución en manos de la víctima, y esta no puede salir sola. Se nos olvida que el causante es el maltratador, es  a él a quien deben dirigirse los mensajes. No acoses, no controles, no maltrates, no violes…, las relaciones deben basarse en la igualdad y el respeto y esa debe ser la base de cualquier educación. Acabar con el maltrato no es cosa de la víctima, es cosa de toda la sociedad. Una sociedad machista educa seres humanos machistas, transmite mensajes a nuestros jóvenes que los interiorizan por aprendizaje vicario. Podemos decirles que somos iguales, que debemos respetar a todo el mundo, pero no es eso lo que ven, ni lo que oyen. Nuestros adolescentes educan su sexualidad viendo pornografía (la edad a la que comienzan a verla es alarmante y no podemos cerrar los ojos a la evidencia), y ellos y ellas reproducen esos comportamientos. Hemos pasado de una educación sentimental basada en las princesas Disney a otra basada en la pornografía, ambas igual de peligrosas.

Como cada vez que se habla de este tema alguien dirá “pero ellas también maltratan”, nadie lo niega, pero miremos las cifras: 35 mujeres han sido asesinadas este año por ser mujeres, solo por eso, de ahí que insista en llamarlos feminicidios. Sí, puede que ellas también maltraten, pero es de necios mirar el dedo que señala a la luna. La violencia de género es un problema social muy serio, el machismo ha matado a muchas más mujeres que el terrorismo de ETA en toda su historia. Lo curioso es que este se consideraba un problema social, y el otro quieren reducirlo a un problema doméstico, y no lo es. Es un problema público, y muy grave. Que afecta a todas las mujeres del mundo. Afirmar que la mayoría de los maltratadores son hombres no es insultar a los hombres, es mostrar la realidad.

El diseño de cada uno de los escalones ha sido realizado por nuestro alumnado de 2º del ciclo formativo de informática “Sistemas Microinformáticos y Redes”: Luis Miguel, Adrián, Irene y Jacob.